🥰 Carta de amor a mi yo de 14 años
Cuando tenía 14 años abrí un blog, aprendí HTML básico, construí una comunidad en Twitter y cree un mundo virtual alternativo a mi realidad que me han hecho ser quien soy ahora.
Cuando tenía 14 años abrí un blog, aprendí conceptos básicos de HTML para personalizarlo a mi gusto, construí una comunidad en Twitter donde interaccionábamos cada día y cree un mundo virtual alternativo a mi realidad. El otro día volví a echarle un vistazo, todo sigue ahí, petrificado, tal y como lo dejé. Fue entonces cuando me percaté de lo que había conseguido sin tener ni la más remota idea de comunicación online. Mucho antes de empezar a estudiar periodismo o incluso dedicarme a las redes.
No tratéis de encontrarlo, es un secreto bajo llave. Tuve la inocente precaución de hacerlo todo bajo un pseudónimo, no porque en esa época pensase en la huella digital, sino porque no quería que la gente más cercana pudiera encontrar esta otra versión vulnerable de mí misma. Esa en la que escribía a diario mis amores y desamores, mis conflictos con amigas o familiares y mi loca pasión por Justin Bieber (sí, fui de esas).
Ahora me doy cuenta de que todo lo que cree en esos siete años, desde 2011 hasta 2018, me ha ayudado a construir la persona que soy hoy en día. Y que muchas de esas habilidades que desarrollé sin darme cuenta con un pequeño proyecto personal, como saber qué significan los diferentes conceptos que se ponen en algunos códigos de HTML, me han servido hoy en día para hacer mejor mi trabajo.
El mundo digital y la tecnología han cambiado mucho, pero en esta carta quiero agradecer a esos tiempos, a mi yo del pasado, por haberse atrevido a construir sin miedo al fracaso. En un momento en el que crear contenido se nos hace bola por la cantidad de expectativas que hay de conseguir el mayor éxito; quiero recordar a esa niña que solo escribía poemas o relatos para sacar de dentro aquello que le preocupaba y que consiguió conectar con cientos de personas (que llegaron a ser amigas) en un mundo virtual. A veces nos olvidamos de que crear es solo una forma de expresar lo que sentimos y que no todo tiene que ser monetizable.
VER 🎬
Hacía mucho que no disfrutaba tanto con una serie y esta, en Movistar+, me ha enamorado. Es cortita, me la vi en un día porque no podía parar. La historia es sencilla y a la vez llena de sentimiento, algunas de las experiencias que cuenta las he vivido en mi proceso de ser una adulta funcional que conduce, así que una razón más para sentirme identificada. Y por cierto, los actores están geniales. Como detalle, tiene ese tono humorístico de ‘Vota Juan’, así que si no fue plato de vuestro gusto igual no os entusiasma tanto. Por cierto, en caso de que necesitéis más argumentos a su favor, os informo de que se ha llevado el premio a mejor serie de comedia en los Feroz de este año.
ESCUCHAR 🎧
Como amante de ABBA, descubrir a un dúo de suecas que cantan muy similar y tienen canciones con ese rollo melancólico que caracteriza al grupo me ha hecho especial ilusión. En la playlist de enero también os puse una de sus canciones, pero este mes ha sido un absoluto bucle. A pesar de que no tienen muchos temas aún, todas son estupendas. Aunque mi favorita sigue siendo ‘What Now’, os dejo este otro para que tengáis más variedad.
LEER 📚
Una noticia corta, al grano, perfectamente explicado y con un despliegue de visualización de datos que da envidia. Ese ha sido el artículo que más me ha gustado este mes. Laura Aragó cuenta en La Vanguardia el drama del alquiler en España y las desalentadoras diferencias entre distintas grandes ciudades. Creo que me independizaré en una caja de zapatos. Si no podéis acceder al artículo os animo a ver los gráficos que han elaborado y trasladado a su Instagram. Dan ganas de salir a quemar cosas, aunque como dije en otra newsletter, quizás los jóvenes no lo hagamos porque estamos tratando de sobrevivir a tanta hostilidad.
DISFRUTAR 📲
Un mes más en “salvando internet o lo mejor de TikTok”, hoy os traigo tres cuentas de recetas que me tienen enamorada. Cada semana busco nuevas comidas que meter en mis tuppers y estos me salvan el pellejo. El mes pasado ya os hablé de Paula Casado, pero esta vez son tres hombres creadores que me tienen maravillada con sus creaciones.
Eric Lahuerta: baja a los mortales las técnicas de los cocineros profesionales y nos enseña a crear platos clásicos desde cero. Me encanta el dinamismo de sus vídeos.
Santifoods: este otro cocinero profesional tiene más éxito en Instagram que TikTok. Le da un toque especial a recetas de toda la vida, algunas son tan curiosas como un tartar de salchichón o rolls de berenjena.
Danvhalling: creo que es amateur y hace muchos vídeos de cocinando varias comidas para sus amigos, como un buffet de tortillas (hola, quiero ser su amiga). Cada vez que los veo se me hace la boca agua. Las recetas tienen una pinta estupenda y son muy originales.
Hasta aquí mis descubrimientos del mes. ¿Conocíais la serie? ¿Habíais escuchado a Honey? ¿Qué os parecen las cuentas de cocineros que os enseño? No dudéis en contármelo en la parte de comentarios o dejarme un like
Que tengáis muy buen próximo mes
(1) No me gusta conducir (Movistar+)
Gracias por leer ‘Descubrimientos del mes’. Si te ha gustado, no dudes en suscribirte para que esta carta con recomendaciones culturales llegue a tu buzón el último domingo de cada mes.